Los docentes requerimos ideas para nuestras reuniones docentes, no hay ninguna razón para hacer actividades alejadas del quehacer docente y de paso divertirnos.
Entre el circulo y el cuadrado. Una cuerda o soga tan grande como participantes se tengan. La cuerda se coloca en el suelo y se les pide que la levanten con los pies no pueden tocarla con las manos, dentro de la soga que estará atada por las puntas deben formar un circulo deben estar todos dentro del círculo, ayudándose mutuamente. (el orientador no participa solo ayuda a recordar las indicaciones no tocar con las manos y todos deben estar dentro, no se pide que se ayude, se observa y se toma nota de las acciones observadas individuales y colectivas, para que en la devolución ellos las mencionen y el orientador recuerde lo que algunos no querrán señalar) Cuando están todos dentro del circulo ( la soga debe ser estrecha no muy holgada de manera que permita que estén dentro pero que estén muy juntos…. En el espacio de cuatro ladrillos de piso más o menos, se determina que es la tierra, el resto es el océano y se caen, de manera que todos deben estar dentro del círculo y dentro del cuadrado del piso, se vuelve complicado controlar ambas y el trabajo en equipo es preciso. El orientador destacará líderes, destacará personas que solo reciben instrucciones, se hará notar la importancia del trabajo en equipo… y se pedirá conclusiones.
Maniatados y Mudos: Se buscan sogas y se atan en parejas frente a frente es prohibido hablar de manera que deben ayudarse a liberarse de la soga pero sin hablar, son miradas o gestos, el orientador iniciará el ejercicio hasta que todos estén maniatados en parejas o tríos, controlando, tomará nota de lo que ocurre y destacará a las parejas que sigan las indicaciones y solicitará honestidad para aquellas que hayan murmurado o susurrado indicaciones no las señalará pedirá que indiquen quienes y porque se vieron en la necesidad de comunicarse. Este ejercicio potencia la comunicación en equipo.
Naufragio: Entregar una hoja de papel a cada docente participante o estudiante. Al grupo se le indica que estamos en un barco y nos avisan que el barco se hunde, podemos llevar tres cosas del barco estaremos en una isla desierta esperando ser rescatados, los objetos que podemos sacar son pequeños, no hay antenas, ni tecnología al lugar donde vamos. Cada docente escribe en una hoja de papel lo que llevaria el orientador escribe en la pizarra los obejtos elegidos al final se hace un recuento de lo que cada participante decidió llevar y cada uno explicó sus razones. Esta actividad es divertida, puesto que el orientador de la actividad les dará solo cinco minutos para decidir que llevar y les quitará las hojas de papel de manera que no puedan cambiar su decisión, nos hace reflexionar sobre lo que valoramos en momentos de crisis y como reaccionamos.
Es divertida y reflexiva.
Estas actividades no tienen limite de tiempo.
En las tres actividades se generan muchas risas, es divertido y hay aprendizaje.
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